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ALBERTO CERRITOS
RUTA CRITICA VIII
23.-Alberto Cerritos, en Barcelona.
Alberto Cerritos, el Complex Arte, el arte electrónico y la especulación expresionista.
Alberto Cerritos, es un creador universal, residente en la Columbia Británica, Vancouver,
Canadá, de nacionalidad canadiense pero salvadoreño de nacimiento. Su creación multidisplinar
comprende una extensa producción pictórica, escultórica, obra digital y murales.
Teórico, poeta y escritor, autor de la teoría del Complex Arte, en la que dialoga sobre los
vericuetos y laberintos existentes en la dinámica plástica de hoy, define que la pasión es
la razón de la mente de hoy quien transforma la frialdad de la tecnología en marasmo febril
vibracional.. Analiza las responsabilidades del arte en la era tecnológica, en la que se
cuestionan los valores tradicionales pero no desaparecen sino que se enriquecen. En este
sentido la actual era combina la síntesis analítica con la expresión libre de fusiones
plásticas de diversa procedencia.
Su obra, en líneas generales, posee un marcado carácter expresionista especulativo, dado
que busca la simbiosis entre elementos tecnológicos y aportaciones cibernéticas, con el
mundo icónico primitivo, de culturas ancestrales indígenas. De ahí que su arte, posea un
cierto mundialismo buscado expresamente, en el sentido de apoyar con fuerza la pintura
emblemática de los signos, nutrida de colores contrastados, combinada con series digitales
intensas, llenas de alusiones y metáforas como las series Narciso, Venus, Corazón o
Cibernética en su extensa producción de arte digital formada por más de cuarenta series
y en sus obras pictóricas sobre tela.
Es un creador de hoy que no renuncia al pasado, que se adentra en los vericuetos de lo
primitivo para resaltar las contradicciones de la creación plástica actual. Estamos viviendo
una auténtica fusión de conceptos, pero, a la vez, constatamos una cierta fuga de la realidad
histórica, con lo que se crea una especie de limbo en el que, se vuelven a repetir conceptos
que en la vanguardia histórica ya se habían tratado con notable profundidad. De ahí que en su
Complex Arte Alberto Cerritos prefiera decantarse por la dialéctica de lo social, incorporando
a su visión cósmica, su intención mundialista, su preponderancia hacia el color,
entendiéndolo de forma visceral, apasionada, conformada por millones de instantes e
intenciones. Hay amor, calidez, sensibilidad y delicadeza concentradas, a pesar de su
expresionismo metafórico tecnológico combinado con los destellos de humanismo lumínico.
Prevalecen una pléyade intensa de formas contrastadas, unas dentro de otras, buscando
expresarse dentro de la notable variedad de laberintos que conforman la existencia plástica.
Entiende que no hay un solo camino, sino, varios, que se cruzan, buscan e incluso se gustan
en el marasmo vibracional de intenciones. No pretende encontrar el término medio, el justo
camino, la fuerza de la determinación para hallar la ecuación exacta, sino que gusta de
expandir su arte, contrastando formas, buscando momentos plásticos sublimes, intensos, que
alcanzan el climax en más de una ocasión. Se trata de exhibir todo el poder visceral frente
a la vertiente más analítica, a partir de constatar las posibilidades expresivas del ciber
arte y la pintura, pero también en su escultura y murales, adentrándose en el corazón de lo
plástico, para hallar la pulsión humana, aquella que nos dice que lo perfecto es utopía, pero
no la razón de la mente intelectual. Somos unos desconocidos para nosotros mismos. Vivimos en
plena huída hacia delante, cuando, la realidad del corazón es la que realmente nos guía en
combinación con la otra realidad espiritual. Sin los ideales y las energías no existiría la
tierra y sus propósitos. Si la maquinaria, la dialéctica del BIT, el sonido de las
instalaciones, la fuerza de la nueva pintura del expresionismo eléctrico, no existiría el alma
del artista. Y eso lo sabe muy bien el creador canadiense.
Joan Lluís Montané.
De la Asociación Internacional de Críticos de Arte. Barcelona, España/2006
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